Cuando era chica, en las siestas, me gustaba leer de un pequeño librito, que nuestros tíos guardaban prolijamente en el estante de una repisa, que ellos llamaban Biblioteca…
- Andá, saca de la biblioteca “La historia de Grecia”, que vamos a leer ordenaba tía María.
Y yo leía…“En la cima de Tesalia las divinidades llevaban una existencia de placeres, se nutrían de ambrosía y néctar y conservaban, aún cuando sus cuerpos eran vulnerables a las armas de los hombres, eterna juventud”…
¡El ácrata estuvo en Grecia! conoció el Monte Olimpo, la residencia de los Dioses, se zambulló en el increíble color turquesa del Egeo, contempló los atardeceres de Mykonos, dejo su huella en el suelo volcánico de Santorini, pero mejor que lo cuente él… yo les muestro algunas de las muchísimas fotos que nos trajo.